Iniciar el proyecto de una startup es emocionante y desafiante a partes iguales y los fundadores de startups deben atender muchas tareas para impulsar el proyecto.
Sin embargo, son muchos los factores a tener en cuenta para que las startup tengan la posibilidad de convertirse en un proyecto consolidado. La clave del éxito del proyecto, suele estar en la figura de los emprendedores, que dirigen el desarrollo global del proyecto, lideran su equipo, negocian con los inversores, buscan nuevos clientes y mercados…pero normalmente la auditoría no forma parte de sus prioridades.
Si actualmente estás impulsando una startup, a continuación te explicamos por qué una auditoría es esencial desde el principio y cómo ésta puede repercutir en el éxito a largo plazo del proyecto.
1. Información financiera sin errores
La contabilidad en ocasiones no es una de las principales prioridades del emprendedor en los primeros años de la startup y habitualmente su gestión es externalizada y en muchas ocasiones con responsables sin conocimientos de aquellos aspectos más habitualmente recurrentes de una startup, lo que hace que nos hallamos que las operaciones contables y mercantiles no siempre están bien documentadas ni contabilizadas, ni las especificidades normativas adecuadamente analizadas y evaluadas, ni los diferentes criterios y requerimientos contables adecuadamente aplicados.
2. Claridad financiera desde el primer día
Mantener registros financieros precisos desde los primeros momentos es crucial para la comprensión de la salud financiera de una startup. Una auditoría no sólo ayuda a identificar posibles errores o inconsistencias en los registros, sino que también proporciona una visión clara de los resultados, de los flujos de efectivo, de los activos y pasivos y de las necesidades financieras desde el principio. Esta claridad financiera permite a los empresarios tomar decisiones más informadas y estratégicas a medida que la empresa evoluciona.
3. Detecta y corrige problemas con antelación
Detectar y corregir problemas es clave en el proceso de auditoría. Ésta no se limita únicamente a la verificación de números, sino que también implica revisar los procesos internos y controles financieros de la startup. Al someter las operaciones a un escrutinio pormenorizado desde el principio, se tiene la oportunidad de identificar y solucionar cualquier problema potencial antes de que se convierta en una crisis. Este enfoque ayuda a establecer una base sólida para el crecimiento futuro y evitar problemas más adelante.
4. Compliance regulatorio y legal
El compliance regulatorio y legal es esencial para las startups, puesto que están sujetas a diversas regulaciones fiscales y legales. Una auditoría es una valiosa herramienta que ayuda a garantizar que la start-up esté al día con todas sus obligaciones contables, fiscales y legales, evitando así multas y sanciones costosas en el futuro.
5. Prepara tu startup para el crecimiento
Las startups buscan un crecimiento rápido, pero conseguirlo puede resultar dificultoso si los sistemas y procesos no están preparados para escalar. Una auditoría ayuda a identificar áreas en las que los sistemas contables y financieros pueden necesitar mejoras para adaptarse al crecimiento futuro de la startup. Esto permite planificar con previsión y garantizar que la empresa esté preparada para aprovechar al máximo sus oportunidades de crecimiento.
6. Confianza para inversores y stakeholders
Cuando se someten las operaciones de una startup a una auditoría se está demostrando un compromiso con la transparencia y la integridad financiera y mejora la imagen frente a los socios de la entidad, y también mejora la imagen frente a proveedores, entidades financieras, etc.
7. Acceso a la financiación externa
Una auditoría de las cuentas anuales mejora las posibilidades de obtener inversión y préstamos al demostrar transparencia y fiabilidad en la gestión financiera de la empresa, lo que puede ser crucial para asegurar financiación adicional a futuro.
8. Cumplimiento con el pacto de socios
Es habitual que los inversores de una startup les exijan que presenten información financiera auditada, aunque legalmente no estén obligadas a ello, por no cumplir los límites establecidos legalmente.
9. Apoyo para Due Dilligence
Facilita el proceso de revisión y evaluación de la empresa por parte de posibles compradores, inversores o socios estratégicos, lo que puede agilizar futuras transacciones o alianzas.
Conclusión
Aunque en las fases iniciales de una startup el control de costes es fundamental, auditar las cuentas anuales es una excelente decisión que pueden tomar los emprendedores e inversores, y por tanto, aunque no sea obligatorio, someter las start ups a auditoría financiera es un mecanismo que incentiva la profesionalización de estas entidades y que dota a los inversores de una fuente de información adicional para tomar sus decisiones y reduce los riesgos del inversor y también del emprendedor.
Vir Audit, líderes en auditorías de startups
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Como firma de auditoría líder en este sector, nuestro equipo cuenta con un amplio background y alta especialización en TIC y Biotec, ayudando a esta tipología de empresas en tareas como la activación de gastos I+D, el registro contable de subvenciones, stock-options, entre otras.
